Tratamientos de un traumatólogo ante el dolor lumbar

El dolor lumbar es una afección bastante común que afecta a muchas personas generando no solo dolor, sino también impidiendo la completa movilidad.

Si bien es cierto que no todas las causas del dolor lumbar son las mismas, en algunos casos puede deberse a trastornos localizados en la columna vertebral. Ahora, ¿cuál es mejor tratamiento si presentas este dolor? Conoce algunas alternativas.

Índice

Los mejores tratamientos ante el dolor lumbar

Existen diferentes tipos de tratamientos para tratar el dolor lumbar. Sin embargo, lo más recomendable es acudir al médico, quien te hará algunos exámenes, por ejemplo, una resonancia magnética lumbar, con el fin de indagar en la causa e indicar el tratamiento adecuado.

Reposo y actividad limitada

Ante el dolor lumbar, lo ideal es acudir a una clínica especialista en traumatología. En estas, una de las recomendaciones más frecuentes es el reposo, con el objetivo de que los tejidos puedan recuperarse.

Sin embargo, el reposo no debe ser completo, porque los músculos se debilitarían, lo que alargaría el proceso de recuperación. Por eso, lo más recomendable es mantener cierta cantidad de actividad física suave y gradual para evitar la rigidez y promover la circulación.

Medicamentos

Para aliviar el dolor y reducir la inflamación, el traumatólogo puede recetar analgésicos de venta libre o medicamentos antiinflamatorios no esteroideos.

En casos de dolor más intenso o crónico por traumatismos columna lumbar, se pueden considerar analgésicos más fuertes o incluso corticosteroides orales o inyectables para reducir la inflamación en la zona afectada.

Fisioterapia

Es posible que necesites de un tratamiento fisioterapéutico con la finalidad de hacer ejercicios de fortalecimiento y estiramiento específicos para el dolor lumbar.

Además, los fisioterapeutas también pueden utilizar técnicas como la terapia manual, la tracción espinal y la estimulación eléctrica, para aliviar el dolor y mejorar la función.

Terapia de calor o frío

La aplicación de calor o frío en el área afectada puede proporcionar alivio temporal del dolor lumbar. El calor ayuda a relajar los músculos y aumentar el flujo sanguíneo, mientras que el frío reduce la inflamación y adormece el área adolorida.

Por eso, en algunos casos las compresas calientes o frías, baños de contraste o parches de gel frío y de calor son la solución.

Inyecciones epidurales

Cuando se trata de dolor lumbar crónico o severo que no responde a otros tratamientos, el traumatólogo puede recomendar inyecciones epidurales de esteroides.

Estas inyecciones se administran directamente en el espacio epidural alrededor de los nervios espinales para reducir la inflamación y el dolor.

Cirugía

Aunque muy pocos, existen casos en los que el dolor lumbar es causado por una afección grave de la columna vertebral, como una hernia discal comprimiendo una raíz nerviosa o una estenosis espinal grave, de ser así, el traumatólogo especialista puede recomendar la cirugía como último recurso.

Este procedimiento puede implicar la eliminación del tejido dañado, la fusión de vértebras o la ampliación del canal espinal para aliviar la presión sobre los nervios.

Si sufres de una patología lumbar, lo más recomendable es que acudas a una clínica especialista en traumatología. Pero antes de hacerlo, te daremos algunas sugerencias para que elijas al mejor médico.

Busca referencias y recomendaciones

Pide recomendaciones a familiares, amigos, compañeros de trabajo o incluso a tu médico de cabecera. Las experiencias personales pueden ser una excelente fuente de información para identificar traumatólogos de confianza.

Verifica la formación y la certificación

Asegúrate de que el traumatólogo esté debidamente formado y cuente con las credenciales necesarias. Revisa su historial académico, certificaciones y afiliación a asociaciones profesionales.

Experiencia y especialización

Considera la experiencia y la especialización del traumatólogo en el área específica que necesitas. Algunos traumatólogos se especializan en ciertas áreas, como cirugía de columna, traumatología deportiva o cirugía de reemplazo articular.

Comunicación y empatía

La comunicación efectiva y la empatía son aspectos importantes en la relación médico-paciente. Por eso, busca un traumatólogo que te haga sentir cómodo, escuche tus preocupaciones, responda tus preguntas de manera clara y te brinde información comprensible sobre tu condición y opciones de tratamiento.