¿Qué es la resonancia magnética de la pelvis?

La resonancia magnética de la pelvis es un estudio seguro, precioso e indoloro que se utiliza para poder determinar la existencia de lesiones en esta parte del cuerpo. La región pélvica está en la parte inferior del tronco, por debajo del abdomen, y se compone de una estructura de huesos, entre los que se incluyen el sacro, el coxis y los coxales. Además, incluye la cavidad en la que se encuentran ubicados los órganos reproductivos. Una de las mejores formas de examinar esta región es por medio de una resonancia magnética.

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Diagnóstico de problemas en la pelvis

Cuando un facultativo sospecha de algún problema en la región pélvica, por lo general solicita al paciente que se realice un ultrasonido, un estudio que puede ser realizado tanto a hombres como a mujeres, si bien en el caso de estas últimas, es posible que se les solicite otras pruebas.

El ultrasonido o ecografía es un procedimiento rápido, económico y seguro que se puede llevar a cabo en cualquier clínica o laboratorio, si bien es cierto que la calidad de las imágenes no es lo suficientemente alta para poder detectar posibles anomalías.

De esta manera, es posible que se solicite una tomografía pélvica, que ofrece mucha más precisión y detalle. Sin embargo, es un procedimiento que emite radiaciones directamente sobre los órganos reproductivos, motivo por el que no se utilizan en mujeres embarazadas ni se recomienda en aquellos pacientes que hayan recibido altas dosis de radiación. En estos casos se opta por una opción más segura, que es la resonancia magnética de la pelvis.

Ventajas de la resonancia magnética de la pelvis

La resonancia magnética de la pelvis muestra imágenes detalladas de esta región anatómica, para lo cual se hace uso de una máquina que recibe el nombre de resonador, la cual se encarga de generar un gran campo magnético, además de emitir ondas de radio que ofrecen información acerca de lo que hay en el interior del cuerpo. Posteriormente, es una computadora la que se encarga de transformar esta información en imágenes.

A diferencia de lo que sucede con la tomografía computarizada, una resonancia magnética se puede repetir con la frecuencia que sea necesaria para poder diagnosticar el problema de salud, además de que es posible realizarla en niños, ancianos y mujeres embarazadas. Otra ventaja es que el medio de contraste a usar en este caso es más seguro que el utilizado en la mencionada tomografía.

¿Para qué sirve la resonancia magnética de pelvis?

La resonancia magnética de la pelvis se realiza, de manera genérica, cuando no es posible llevar a cabo un ultrasonido o tomografía, ya sea por las circunstancias de la persona o por la situación en la que se encuentran, como en el caso de las embarazadas.

A través de la resonancia de la pelvis se muestran los huevos, músculos, ligamentos y órganos, siendo por todo ello una excelente herramienta para detectar cáncer o distinguir quistes de tumores. De igual forma, se usa para dar seguimiento a un tratamiento o incluso poder llegar a planificar una cirugía.

A través de la resonancia magnética de la pelvis se pueden detectar:

  • Metástasis en ganglios linfáticos o huesos.
  • Cáncer de próstata o testículos (en hombres).
  • Deformidades pélvicas.
  • Cambios patológicos en vejiga, intestino grueso o recto.

Además de todo ello, la resonancia magnética de la pelvis femenina puede detectar cambios patológicos en útero, ovarios y trompas de falopio. Otro uso es la detección de endometriosis, así como defectos del desarrollo en el feto, a partir del segundo trimestre de embarazo.

Resonancia magnética de la pelvis con contraste

Un medio de contraste es una sustancia que mejora la visibilidad de ciertas estructuras al llevar a cabo un estudio de imagenología. En el caso de la resonancia magnética, la sustancia usada se llama la gadolinio. Cabe tener en cuenta que esta sustancia es más segura que el yodo que se emplea en el caso de una tomografía.

La resonancia magnética de la pelvis con contraste muestra una mayor claridad con ciertas anomalías, por lo que tiene un elevado valor diagnóstico. Sin embargo, debes hacerte una prueba  de laboratorio con anterioridad para así conocer el estado de salud de los riñones.

Cómo prepararse para una resonancia de la pelvis

Para realizar una resonancia magnética de la pelvis sin contraste se necesitan una serie de preparaciones, como son llevar la identificación oficial, contar con una orden médica, la documentación que tenga que ver con los implantes metálicos o dispositivos como bomba de insulina, marcapasos…

Además, se aconseja acudiendo con ropa fresca, cómoda y sin elementos metálicos, así como una dieta de fácil digestión desde el día previo al estudio, y un ayuno de 6 a 8 horas. En algunos casos, te solicitarán no tomar líquidos 4 horas antes del estudio, debiendo tener la vejiga llena para examinar las vías urinarias. De igual forma, se pueden tomar medicamentos para prevenir gases durante el estudio y hay que defecar antes del estudio.

Es muy importante que no haya heces o gases en el tracto gastrointestinal, ya que podrían alterar las imágenes. Además, su presencia puede provocar movimientos y contracciones en los intestinos. El personal del centro diagnóstico te ofrecerá las instrucciones exactas que debes seguir.

Por otro lado, si se trata de una resonancia magnética de la pelvis con contraste, será necesario, además de lo anterior, realizar una prueba de creatinina en sangre.

Cómo se hace una resonancia pélvica

Antes de entrar a la sala en la que se lleva a cabo la resonancia magnética de la pelvis, será necesario retirar objetos metálicos, aparatos electrónico y tarjetas de pago, y es muy probable que tengas que ponerte una bata de hospital.

Luego acudirás a la sala en la que está el resonador, en la que tendrás que acostarte sobre una camilla que se introducirá en el aparato. Una vez listo, el personal se irá de la sala para monitorizar la prueba en un cuarto separado, aunque siempre habrá comunicación con el radiólogo. Después se iniciará la toma de imágenes, un procedimiento indoloro pero que, si sientes cualquier incomodidad o malestar, debes advertir al personal.