Los escalenos son unos músculos localizados en la parte anterior del cuello, ya que son grandes protagonistas en el tratamiento de (aproximadamente) el 80-90% de los casos que tratamos en nuestro centro.
Estos músculos presentan una disfunción (tono elevado, puntos gatillos miofasciales, bandas tensas, contracturas, acortamiento, etc…) muy frecuentemente, dada su situación anatómica (ahora daremos pinceladas sobre su anatomía), su función respiratoria, y su alteración ante procesos de estrés.
Índice
Anatomia de los músculos escalenos
Los músculos escalenos se encuentran en la zona anterior, en los laterales del cuello. Están formados por tres grupos de pares de músculos, escaleno anterior, escaleno medio y escaleno posterior.
Los escalenos se originan en las vértebras cervicales, de C2 a C7, y van a insertarse en la primera y segunda costilla.
La función va a depender del grupo que estemos hablando. Los escalenos medio y anterior se van a encargar hacer inclinación lateral hacia el mismo lado y rotación hacia el lado contrario, además, elevan la primera costilla siendo músculos inspiradores accesorios. Los escalenos posteriores inclinan y rotan hacia el mismo lado y elevan la segunda costilla.
Además, si esta musculatura se altera y acaba ascendiéndonos la 1º o 2º costilla, es posible que nos acabe afectando al espacio subclavicular, y todo lo que pasa por este espacio, sobre todo la arteria y vena subclavia.
Es importante saber que esta directamente relacionados con el plexo braquial porque este pasa entre escalenos anterior y medio. El nervio frénico pasa por delante del anterior y de la primera costilla
Alteraciones de los escalenos
Las alteraciones como tensión, aumento de tono o puntos gatillo en estos músculos pueden provocar la compresión, por la disminución del espacio, del paquete vasculonervioso (produciéndose un atrapamiento o «estrangulamiento» del conjunto de nervios y vasos que, conjuntamente, atraviesan planos del cuerpo, y tejidos corporales) que pasa entre ellos, nombrado anteriormente, y que se encarga de la inervación y vascularización de todo el miembro superior. Por lo tanto, esto significa que el miembro homolateral al lado afectado tendrá un menos aporte sanguíneo y un deterioro en la conducción nerviosa.
Los agentes que producen esta alteración pueden ser diversos como por ejemplo, adaptaciones en la columna dorsal y cervical, exceso de trabajo, estrés, posturas mantenidas y movimientos repetitivos, descanso incorrecto etc.
Existiran ciertas posturas y movimientos que afecten más a esta musculatura, como por ejemplo, trabajar sentado largas horas, viajes largos en coche, trabajos de mecanización en ordenador, etc…
Además, se ha demostrado la fuerte relación entre esta musculatura y problemas de ansiedad y estrés (sobre todo cuando este se cronifica y se mantiene en el tiempo), y con problemas respiratorios, ya que son músculos accesorios en la inspiración ( y en procesos de estrés elevado también tendremos una respiración alterada).
SÍNTOMAS
No suelen crear limitaciones en la movilidad de las funciones que desempeñan en estos músculos pueden dar dolor referido en los brazos antebrazos, dedos, pecho y escápula. Así pues, podemos notar dedos de la mano entumecidos o con hormigueo (falsos síndromes de túneles carpianos), debilidad muscular del brazo y dificultad del movimiento, dolores cervicales, dolor irradiado al pecho, cansancio, pesadez del miembro superior, torpeza en los movimientos digitales y la presión incluso mareos.
La intensidad de todos esos síntomas va a depender del grado de la lesión y el nivel de compresión. Los síntomas se suelen manifestar en las primeras horas de la mañana y pueden despertar al paciente durante la noche.
TRATAMIENTO
En primer lugar, el objetivo que debemos abordar en el tratamiento fisioterapéutico de este síndrome de los escalenos, debe ser identificar y eliminar los agentes causantes de la excesiva tensión muscular, ya que recuperando el tono muscular normal recuperaríamos el espacio natural entre los vientres del musculo y evitaríamos la compresión del paquete vasculonervioso. En la exploración se identificará las posibles alteraciones o adaptaciones de la columna que pueden causar la lesión y se utilizará para corregirlas técnicas osteopáticas y fisioterápicas.
Para seguir favoreciendo la relajación muscular, continuaremos con terapia manual sobre puntos gatillo y bandas tensas, liberación miofascial…Estas técnicas no se aplicarán solo en los escalenos, si no también en los músculos que están directamente relacionados como por ejemplo el pectoral menor, trapecio y la musculatura del brazo que puede estar sobrecarga por la alteración del plexo.
Por ultimo, los estiramientos son importantes, haciendo mayor hincapié sobre escalenos medio y anterior.
Además, se puede añadir neurodinamia para devolver el deslizamiento fisiológico de los nervios implicados, como son el nervio mediano, cubital y radial.
Será fundamental educar y mandar estiramientos para que el paciente los haga en casa, para conseguir mantener los resultados que hemos conseguido con las técnicas aplicadas durante la sesión.
Para conseguir que el tratamiento de la sesión de fisioterapia se alargue en el tiempo se puede colocar de forma complementaria un vendaje neuromuscular.