La anterolistesis es un trastorno que se produce en la columna y que se caracteriza por la dislocación de al menos una de las vértebras con relación a otra. Esta situación tiene lugar en aquellos casos en los que un cuerpo vertebral superior, la parte principal de una vértebra, se desliza hacia adelante en relación con la vértebra inferior.
A medida que esta se mueve fuera de la posición, puede llegar a ocasionar que se pellizquen los nervios espinales conectados a las vértebras que se encuentran involucradas en el desplazamiento y también podría llegar a dañar la médula espinal. Esta afección se puede clasificar en función de la gravedad sobre la base de qué tan adelante se haya llegado a deslizar la vértebra.
Las fracturas son la causa más común por la cual se produce la anterolistesis, si bien es cierto que puede llegar a venir dada por otras causas. Esta afección se observa con una mayor asiduidad en la cuarta y quinta vértebras lumbares, aunque pueden llegar a darse en otras regiones de la columna. Los pacientes pueden llegar a experimentar diferentes síntomas, que varían en función de la ubicación y la propia gravedad de la anterolistesis.
No obstante, hay que tener en cuenta algunos signos comunes como son el hormigueo, entumecimiento, sensaciones anormales, pérdida del control de la vejiga o intestinos, dolor en la columna o la región inervada por los nervios involucrados y dificultad para que se puedan llegar a controlar las piernas.
Los estudios de imágenes médicas con usados para visualizar la columna. Las vértebras desplazadas serán claramente visibles a través de estas imágenes, y un profesional tendrá la capacidad para poder determinar el grado de desplazamiento. Esto se tendrá en cuenta junto a los resultados y la entrevista con el propio paciente, de forma que pueda desarrollar un plan de tratamiento. En aquellos casos en los que el paciente tiene antecedentes de lesiones de la columna u otros problemas, es posible que el médico considere que el tratamiento conservador no sea suficiente para hacer frente al problema en cuestión.
Los tratamientos conservadores para la anterolistesis consisten principalmente en el reposo y la fisioterapia suave. Es posible que el paciente se ponga en reposo en cama para conseguir que la columna pueda recuperarse sin que tenga que hacer frente a esfuerzos, y de esta manera se pueda llegar a extender el proceso de curación.
En el caso de que se trate de una lesión grave, un médico puede recomendar que se opte por evitar este tratamiento; y en su lugar apostar por otras opciones quirúrgicas como la fusión espinal, mediante la cual la vértebra desplazada será movida de nuevo a su lugar; y se fusionará con una cercana para hacer que se mantenga alineada. La cirugía de columna permitirá solucionar la posición anormal de las vértebras, si bien hay que tener en cuenta que este procedimiento puede conllevar riesgos graves, como son el riesgo de infección o el daño permanente a los nervios.
En el momento en el que se diagnostica la anterolistesis, los pacientes pueden llegar a preguntar por los tratamientos disponibles y obtener información acerca de los riesgos y los beneficios de cada uno de ellos. El médico puede discutir el posible tiempo de recuperación y otros temas que pueden llegar a ser de gran importancia para el paciente.
En todo caso, los pacientes de anterolistesis deben ser conscientes de que aunque la cirugía puede llegar a permitir que se reposicionen las vértebras, en ocasiones pueden llegar a hacer que persistan síntomas como el dolor y los problemas neurológicos.
Índice
Anterolistesis según el método Sohier
En el método Sohier cuando ya existe anterolistesis, se busca favorecer el deslizamiento posterior de las vértebras que se ven afectadas; y esto se consigue llevándolas hacia un plano oblicuo posterior para que, por la gravedad, las vértebras tengan una tendencia de retroceder hacia el dorso de la columna vertebral.
Qué provoca la anterolistesis
La anterolistesis se produce con motivo de la espondilolistesis, que es el desplazamiento de una vértebra sobre otra y que se puede enumerar hasta en cinco grados en función de la distancia que se haya deslizado. Cuando el deslizamiento de la vértebra se produce hacia adelante se denomina anterolistesis, y si es hacia la parte posterior recibe el nombre de retrolistesis. En aquellos casos en los que se desliza en exceso, el hueso puede llegar a atrapar la médula o los nervios.
Puede llegar a ser inestable y provocar estenosis de canal y/o lumbalgia con los movimientos. Se produce con mayor frecuencia en determinados segmentos lumbares, sobre todo en los últimos (L4-L5-S1) aunque también puede llegar a darse a nivel cervical ,siendo estos aspectos a tener en cuenta para poder conocer en profundidad todo lo relacionado con esta dolencia.
Síntomas de la espondilolistesis
La sintomatología que puede dar una espondilolistesis es tanto una radiculopatía, que es el dolor en las piernas si es lumbar o en brazos si es cervical, como si se tratase de una hernia discal, o la claudicación de la marcha como una estenosis de canal.
También suelen ser diagnosticadas a raíz de un dolor lumbar con irradiación a glúteos por sobrecarga, y en la mayor parte de los casos, el paciente refiere más dolor en aquellos momentos en los que se encuentra de pie o al caminar. Además, en casos severos puede provocar una inestabilidad en la marcha, con trastornos sensitivos e incluso llegando a provocar incontinencia.
Los síntomas más habituales son el dolor en piernas o brazos, dependiendo de la localización, así como el dolor irradiado en los glúteos y la inestabilidad de la marcha, sin olvidar otros síntomas frecuentes como los trastornos sensitivos y/o incontinencia.
Si se padece cualquiera de estos síntomas es necesario ponerse de forma inmediata en las manos de un profesional que pueda llevar a cabo el correspondiente diagnóstico, a través del cual podrá determinar la manera de proceder para poder tratar la anterolistesis y así permitir que se pueda llegar a solucionar un problema que puede llegar a ocasionar grandes dolencias.
